Había una vez dos animales que vivían en el mismo bosque: Fido, el fiel perrito, y Pussy, la bonita gatita. Ambos se querían mucho, pero su relación distaba mucho de ser perfecta.
Fido sentía un gran amor por Pussy y ella también correspondía a sus sentimientos de todo corazón. Pero poco sabían que otra criatura ocupaba un lugar importante en su corazón: ¡Paul Parrot!
Paul Parrot era un loro infiel que volaba por el bosque buscando la atención de todos los animales con los que se cruzaba. Desgraciadamente, había visto la belleza de Pussy y no tardó en enamorarse perdidamente de ella. La cortejó día tras día con promesas de lealtad y fidelidad eternas, para desgracia de Fido.
Desesperado por recuperar el afecto de Pussy, Fido probó todo lo que se le ocurrió: jugar a buscarla con su palo favorito o darle golosinas siempre que las quisiera, pero nada parecía funcionar, ya que Paul entraba en acción en cualquier ocasión. Desesperado, Fido incluso buscó la ayuda de sus amigos del bosque, pero ninguno de ellos pudo encontrar una solución.
Un día, mientras daban un paseo juntos, Paul reveló por fin su verdadero carácter cuando empezó a coquetear descaradamente con todo tipo de aves hembras que pasaban por la zona. Al ver esto, la pobre Pussy se dio cuenta de que, después de todo, quizá Paul no era tan leal y devoto como ella creía… y, al darse cuenta de lo estúpidamente encaprichada que había estado con él durante todo este tiempo, ¡decidió de repente, en ese mismo momento, no volver a confiar en unas criaturas tan deshonestas!
Mientras tanto, antes de alejarse triste pero satisfecha, Pussy se volvió por última vez hacia Fido (su fiel amigo)
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